La foto que me ha servido de inspiración para relatar una pequeña historia es la que veis en el margen.
Yo vi esta foto y la primera palabra que me vino a la cabeza fue borrosidad. Creo que estamos plagados de ella en la sociedad contemporánea, por eso decidí hacer una historia que plasmara en que momentos esa borrosidad de la que yo hablo se hace patente. Son muchas las veces que no vemos más allá de lo que queremos.
Resulta que ese jefe al que criticamos tiene familia e hijos, ese árbitro al que insultamos es una persona que tiene sentimientos y ese político al que tachamos de incompetente es humano y puede equivocarse como nosotros. No queremos ver esa otra cara de las personas porque haría difícil que siguiéramos tratándoles como lo hacemos en ocasiones. Lo que yo quiero plasmar en esta micro-historia es como afecta a estas personas lo que se dice de ellas, porque aunque a menudo se pongan una coraza de cara al público y hacen ver que nos les afecta lo más mínimo, esto no es así. Las críticas que reciben afectan a su autoestima por mucho que intenten aparentar que no.
Que la historia se desarrolle durante una terapia de grupo me ayuda a plasmar lo que yo quiero. A esta terapia asisten: Carlos Escuder, Miriam Castro y Rafael Cantalejo.
Carlos es el director general de Danone España. Tiene 37 años. Está casado y tiene tres hijos. Le encanta disfrutar con ellos del fin de semana. Digo el fin de semana porque los días de cada día llega a casa y ya están durmiendo. El otro día mientras estaba dentro de uno de los lavabos de la empresa escuchó una conversación que acabó con él por dentro. Decían que era una persona sin escrúpulos, un amargado que los explotaba. No era la primera vez que escuchaba una conversación de ese tipo pero ésta le llegó a lo más profundo de su ser y decidió que era hora de ponerse en busca de una solución para no sentirse repulsivo consigo mismo. Aunque a veces pudiera dar esa imagen, no es así e intenta hacer las cosas lo mejor que puede. Esa posible solución la quiere encontrar en una terapia de grupo.
Miriam es consejera de educación en Cataluña. Tiene 33 años y desde que tenía 10 sabe que quiere dedicarse a la política. No está casada pero vive con su pareja. El otro día acudió a un acto de inauguración de unos intensivos de verano en la UB y a la salida le esperó un numeroso grupo de estudiantes para increparla por la aplicación del Plan Boloña. Tuvo que escuchar que la llamaran de todo menos bonita. Esto ha hecho que desde ese día su estado de histeria permanente se acentúe más, porque lo del Plan Boloña creía que sería algo positivo para la educación y resulta, que en vez de agradecimientos lo único que recibe últimamente son insultos. Su pareja le ha dicho que no puede seguir con ese estado de estrés y la ha obligado a ir a una terapia de grupo.
Rafael es árbitro de primera división en España. Tiene 35 años. Está casado y tiene 2 hijos. Hace tres semanas le tocó arbitrar el Madrid-Barça y no pitó un penalti a favor del Madrid que sí que había sido. A la entrada en los túneles de vestuarios recibió un botellazo en el brazo, a la vez que escuchaba como todo el público del Bernabeu coreaba: “Arbitro que malo eres, que malo eres, árbitro que malo eres...” La presión de la prensa de los días posteriores le llevó a tomar la decisión de ir a una terapia de grupo porque si seguía como hasta ahora anímicamente no respondía de lo que sería capaz de hacer.
Hasta aquí la presentación de los personajes. Los tres coinciden en una terapia de grupo y explican cual es su problema. Se escuchan y se apoyan entre ellos. La psicóloga es la que va diciendo cuando tiene que hablar uno y otro, además les hace preguntas. Este último personaje cierra la sesión con un discurso que hace referencia a lo que se ha tratado durante la terapia (ha de hacer referencia a la borrosidad).
Esta es mi propuesta para un micro relato que hemos de hacer en clase. Cada uno de los alumnos expondrá su idea y se decidirán qué tres historias se ruedan finalmente.
Yo vi esta foto y la primera palabra que me vino a la cabeza fue borrosidad. Creo que estamos plagados de ella en la sociedad contemporánea, por eso decidí hacer una historia que plasmara en que momentos esa borrosidad de la que yo hablo se hace patente. Son muchas las veces que no vemos más allá de lo que queremos.
Resulta que ese jefe al que criticamos tiene familia e hijos, ese árbitro al que insultamos es una persona que tiene sentimientos y ese político al que tachamos de incompetente es humano y puede equivocarse como nosotros. No queremos ver esa otra cara de las personas porque haría difícil que siguiéramos tratándoles como lo hacemos en ocasiones. Lo que yo quiero plasmar en esta micro-historia es como afecta a estas personas lo que se dice de ellas, porque aunque a menudo se pongan una coraza de cara al público y hacen ver que nos les afecta lo más mínimo, esto no es así. Las críticas que reciben afectan a su autoestima por mucho que intenten aparentar que no.
Que la historia se desarrolle durante una terapia de grupo me ayuda a plasmar lo que yo quiero. A esta terapia asisten: Carlos Escuder, Miriam Castro y Rafael Cantalejo.
Carlos es el director general de Danone España. Tiene 37 años. Está casado y tiene tres hijos. Le encanta disfrutar con ellos del fin de semana. Digo el fin de semana porque los días de cada día llega a casa y ya están durmiendo. El otro día mientras estaba dentro de uno de los lavabos de la empresa escuchó una conversación que acabó con él por dentro. Decían que era una persona sin escrúpulos, un amargado que los explotaba. No era la primera vez que escuchaba una conversación de ese tipo pero ésta le llegó a lo más profundo de su ser y decidió que era hora de ponerse en busca de una solución para no sentirse repulsivo consigo mismo. Aunque a veces pudiera dar esa imagen, no es así e intenta hacer las cosas lo mejor que puede. Esa posible solución la quiere encontrar en una terapia de grupo.
Miriam es consejera de educación en Cataluña. Tiene 33 años y desde que tenía 10 sabe que quiere dedicarse a la política. No está casada pero vive con su pareja. El otro día acudió a un acto de inauguración de unos intensivos de verano en la UB y a la salida le esperó un numeroso grupo de estudiantes para increparla por la aplicación del Plan Boloña. Tuvo que escuchar que la llamaran de todo menos bonita. Esto ha hecho que desde ese día su estado de histeria permanente se acentúe más, porque lo del Plan Boloña creía que sería algo positivo para la educación y resulta, que en vez de agradecimientos lo único que recibe últimamente son insultos. Su pareja le ha dicho que no puede seguir con ese estado de estrés y la ha obligado a ir a una terapia de grupo.
Rafael es árbitro de primera división en España. Tiene 35 años. Está casado y tiene 2 hijos. Hace tres semanas le tocó arbitrar el Madrid-Barça y no pitó un penalti a favor del Madrid que sí que había sido. A la entrada en los túneles de vestuarios recibió un botellazo en el brazo, a la vez que escuchaba como todo el público del Bernabeu coreaba: “Arbitro que malo eres, que malo eres, árbitro que malo eres...” La presión de la prensa de los días posteriores le llevó a tomar la decisión de ir a una terapia de grupo porque si seguía como hasta ahora anímicamente no respondía de lo que sería capaz de hacer.
Hasta aquí la presentación de los personajes. Los tres coinciden en una terapia de grupo y explican cual es su problema. Se escuchan y se apoyan entre ellos. La psicóloga es la que va diciendo cuando tiene que hablar uno y otro, además les hace preguntas. Este último personaje cierra la sesión con un discurso que hace referencia a lo que se ha tratado durante la terapia (ha de hacer referencia a la borrosidad).
Esta es mi propuesta para un micro relato que hemos de hacer en clase. Cada uno de los alumnos expondrá su idea y se decidirán qué tres historias se ruedan finalmente.
1 comentario:
Sinceramente me gusto mucho...
Llegue de improviso.
Que tengas buena dia
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